Las mascarillas médicas o quirúrgicas son un artículo médico homologado que impiden la transmisión de los virus respiratorios y de bacterias que se transmiten por la tos y estornudos.  

Por lo tanto, estas mascarillas previenen de la transmisión del virus a otras personas a nuestro alrededor. 

Al ser un medio de protección personal debemos de usarlas debidamente cubriéndonos la boca, nariz y mentón.

Estas nos ayudarán a reducir o controlar la propagación que se produce a través de las gotas respiratorias que producimos.

Como fabricantes de mascarillas médicas o quirúrgicas seguimos comprometidos con la sociedad para hacer frente a esta segunda ola en la que estamos inmersos. 

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Hay que tener en cuenta algunas ventajas que nos ofrecen las mascarillas, como por ejemplo:

  • Minimizar el riesgo de contagio potencial que nos permiten respirar adecuadamente.
  • Podemos comunicarnos  con claridad y no provocan ningún tipo de deterioro de la piel del rostro.

Utilizar la mascarilla más que una obligación por parte de las autoridades, es un acto de responsabilidad hacia nuestra salud y a la de los demás.

En ocasiones, no es posible guardar la distancia recomendada de metro y medio y sabemos que al hablar arrojamos unas micro gotículas que pueden ser conductoras del virus.

Es evidente que puede llevar lugar a contagio por lo que debemos protegernos adecuadamente. Por esta razón,  también debemos asegurarnos de lavarnos las manos a menudo para evitar la propagación del virus.

Utilizando este tipo de mascarillas se adquieren los siguientes beneficios:

  • Protegen a todas las personas que las llevan incluso a las que nos rodean.
  • Son eficaces para las personas que son asintomáticas
  • Su diseño es ergonómico, adaptable y ajustable al rostro para evitar que entre cualquier partícula del exterior.
  • Se cumple con la normativa requerida cuando no se puede guardar la distancia de seguridad.
  • Cumplen con la normativa UNE 14683 reduciendo  la transmisión de agentes infecciosos 
  • La venta de estas mascarillas son libres, los ciudadanos las pueden adquirir de forma rápida y sencilla.

Como fabricantes de mascarillas médicas o quirúrgicas  podemos destacar que estas son las más recomendadas por los especialistas epidemiológicos para hacer frente al COVID-19.

Por consiguiente, podemos recalcar que estas tienen unos filtros que son más eficaces para hacer frente al coronavirus.

Durante este tiempo que vivimos en Europa, las mascarillas médicas o quirúrgicas se han convertido en un producto de primera necesidad para cada uno de nosotros. 

Desde el mes de marzo que empezó el COVID-19 se han fijado protocolos para impedir la propagación del virus. La principal ventaja que tenemos en España como fabricantes de mascarillas médicas o quirúrgicas es la prevención de la demanda que presenta la sociedad.

Por este motivo, es importante tener en cuenta que a la hora de comprar mascarillas médicas o quirúrgicas se apoye a la economía local, así los fabricantes podrán ofrecer una oferta constante de mascarillas para todos los ciudadanos.

La comercialización de mascarillas al ser productos sanitarios, la Agencia Española de productos sanitarios, audita a los fabricantes de mascarillas médicas o quirúrgicas  para ver el diseño de estas, así como los procedimientos de fabricación si son adecuados a la normativa.

Por lo que sí pasa favorablemente esta auditoría,  el Organismo Notificador de estos productos emite un certificado CE para que el fabricante pueda elaborarlas de acuerdo a una declaración de conformidad, y así pueda colocar este distintivo en las mascarillas.

Por otra parte, debemos tener en cuenta que el sector sanitario tiene mayor nivel de exposición al coronavirus. Por lo tanto, para ellos las mascarillas más recomendadas son las médicas o quirúrgicas ya que  son idóneas para el personal médico en general, desde enfermeras, médicos hasta fisioterapeutas.

El uso se precisa en cualquier momento incluyendo el lugar de trabajo, se recomienda utilizar la mascarilla cuando vamos a visitar a amigos o familiares para seguir con los protocolos de prevención de contagio.